Habia una vez un señor, tan flaco y tan chiquito, que dormia en una aguja, y se tapaba con un hilo.
…Había una vez un señor, tan flaco y tan chiquito, que dormía en una aguja, y se tapaba con un hilo.
…Había una vez un señor, tan flaco y tan chiquito, que dormía en una aguja, y se tapaba con un hilo.
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