Aquella ama de casa tenia tan mal caracter que ninguna muchacha le duraba. La ltima que tuvo se marchó indignada no sin…
…Aquélla ama de casa tenía tan mal carácter que ninguna muchacha le duraba. La última que tuvo se marchó indignada no sin antes decirle a su patrona que se hallaba en la dulce espera:
Le deseo que nazca bien el varoncito.
¿Y cómo sabe que será niño?, pregunta sorprendida.
Porque a usted, no hay mujer que la aguante nueve meses.
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